La integración continua (CI) y la Distribución Continua (CD), consisten en la automatización del proceso de comprobación, despliegue y publicación de nuestras aplicaciones, en entornos de producción, con el objetivo de minimizar la intervención humana, reduciendo así el número de errores y el tiempo requerido.

Gitlab ofrece la posibilidad de ejecutar todos los procesos en un mismo espacio de trabajo, sin la necesidad de instalaciones adicionales, gracias a la implementación de contenedores basados en Docker.
Aunque en las grandes empresas existen equipos de trabajo especializados en las tareas despliegue e infraestructura, como desarrolladores, añadir esta clase de conocimientos a nuestro perfil profesional ampliará nuestra autonomía.
Si no tienes acceso a Gitlab, puedes crear una cuenta gratuita que permite explorar sus funcionalidades sin el riesgo de incurrir en gastos que se activan automáticamente como ocurre con otras plataformas.

Una vez terminado el periodo de prueba, si decides no mantener tu cuenta activa, encontrarás todas las instrucciones para eliminarla fácilmente en la documentación dentro de Gitlab.

GitLab utiliza algo llamado Pipeline, que consiste en líneas de código que nos permiten interpretar cada uno de los cambios en nuestro repositorio y definir el comportamiento de los procesos que se ejecutarán dentro de GitLab en función de dichos cambios.
Una vez dentro de GitLab, necesitaremos un proyecto con el que vamos a trabajar, como todavía no tenemos ninguno, presionaremos el botón de la parte superior derecha de la pantalla.

En la siguiente pantalla, seleccionaremos una plantilla de proyecto vacío, que nos facilitará esta primera experiencia.

A continuación, añadiremos un nombre a nuestro proyecto y le asignaremos un grupo, en caso de que no se haya generado alguno automáticamente.
Luego nos aseguraremos de que está marcada la opción de añadir un archivo Readme a nuestro nuevo repositorio.

Finalmente daremos clic en el botón de la parte inferior que generará un nuevo repositorio e incluirá un archivo de texto con el nombre Reame.md.

Se nos abrirá una nueva pantalla en la que podremos visualizar toda la información relacionada con nuestro repositorio.

Como mencionamos al principio, GitLab ofrece la posibilidad de operar íntegramente dentro de su entorno de trabajo, una de estas opciones es un IDE propio al que podremos acceder directamente, haciendo clic en el menú de la parte derecha en la pantalla de nuestro proyecto.

Este IDE integrado, nos ofrece una interfaz gráfica con todo lo necesario para operar con nuestros proyectos sin la necesidad de realizar ninguna descarga o instalación adicional.
